Las mujeres en cualquier etapa de sus vidas han presentado molestias en la zona vaginal a
causa de la resequedad; esta afección es llamada vulvovaginitis atrófica, considerada en la
mayoría de las culturas un tabú, y por ello quienes la presentan no lo hablan, no lo discuten
y no buscan alguna solución.
Es necesario insistir en lo normal qué es presentar alguna enfermedad como esta, eliminar
el tabú y apoyar a un mayor número de mujeres libres con un estado mental, emocional y
sexual saludable.
¿Qué es la vulvovaginitis atrófica?
La vulvovaginitis es la enfermedad que ocurre cuando la vagina se infecta o inflama; sin
embargo, la atrofia vaginal se refiere al adelgazamiento, hinchazón y resequedad de las
paredes vaginales.
Por lo general, la vulvovaginitis atrófica ocurre por una baja producción de estrógeno, con
mayor frecuencia sucede luego de la menopausia y aproximadamente la mitad de ella
padece esta enfermedad; solo un 20% muestra síntomas.
¿Cuáles son las causas de la vulvovaginitis atrófica?
La vulvovaginitis atrófica no se manifiesta en un grupo específico, ocurriendo en cualquier
edad; sin embargo, suele verse en mujeres menopaúsicas o en niñas antes de la pubertad,
particularmente en aquellas con una higiene deficiente o con una microbiota alterada.
Uno de los mayores riesgos para presentar vulvovaginitis atrófica, es el mal hábito de
limpiarse de atrás hacia delante cuando van al baño, lo cual puede producir contaminación
e infección, debido al arrastre de microorganismos del ano hacia la vagina.
Síntomas y signos
Nombraremos aquí los signos que aparecen a nivel de las zonas genitales, ya que la
resequedad y la infección causan picazón, irritación, ardor y mal olor. Además, es habitual
que exista incomodidad a la hora de tener relaciones sexuales, generando así la pérdida del
apetito sexual, y más grave aún, cuando se suman todos estos signos, la autoestima de la
mujer va disminuyendo, la autoimagen se va desmoronando y así se va deteriorando la
relación de pareja (si existe).
Razones de la disminución de los niveles de estrógeno
La resequedad vaginal se asocia con los niveles de estrógeno, recordando que esta
hormona es la encargada de mantener el recubrimiento vaginal y el nivel de los flujos
naturales.
Los niveles de estrógeno se pueden modificar por el ciclo de la mujer, la lactancia, el
embarazo, por la extirpación de los ovarios, la quimioterapia, la radioterapia o con el abuso
o excesos de higiene en las zonas íntimas.
Otras causas, están asociadas al uso de ropa ajustada o no absorbente, generando
erupciones por calor o enfermedades en la piel, también el uso de toallas sanitarias en mal
estado que pueden causar irritación, picazón y flujo con olor fuerte.
Ahora, hay que tener claro que la posibilidad de tener esta enfermedad aumenta en mujeres
que no tuvieron un parto vaginal natural, también el tabaquismo disminuye la cantidad de
oxígeno, haciendo que a la vagina no llegue la cantidad de oxígeno necesaria, ocasionando
estrechamiento en las zonas donde hay menor cantidad de oxígeno.
Tratamientos naturales para la vulvovaginitis atrófica
Sugerimos los siguientes remedios naturales, afín de aliviar el dolor y calmar la
inflamación. Proponemos la ingesta de alimentos ricos en estrógeno, también usar algunas
cremas y baños para aliviar la resequedad, y el consumo de tés ricos en estrógeno.
1 El yogurt está entre los mejores remedios naturales para controlar la resequedad
vaginal:
ya que tiene probióticos o cultivos que aumentan el número de bacterias
saludables, apoyando con una buena lubricación.
1. Consigue dos cucharadas de yogurt 20 a 25 gramos.
2. Aplica el yogurt en toda la zona vaginal y déjala de 20 a 30 minutos.
3. Retírala con abundante agua.
4. Haz esto dos veces al dia.
2 Manzanilla es una flor milagrosa:
colabora tanto en la digestión, como en el
insomnio, también actúa como calmante natural. Además, con la manzanilla
también se pueden realizar baños con agua tibia en la zona genital y gracias a las
propiedades antiinflamatorias, logra tranquilizar la sensación de comezón y la irritación.
1. Flor de manzanilla 10 a 20 gramos.
2. Abundante agua, de medio a un litro.
3. Hierve el agua, y cuando esté en punto de ebullición, introduce la
manzanilla.
4. Apágalo y déjalo reposar hasta que llegue a una temperatura soportable.
5. Tamiza la infusión.
6. Realiza las duchas de asiento, para una pronta mejoría.
7. Repite esto todos los días.
3 La cúrcuma tiene múltiples propiedades entre las que destaca como bactericida:
previniendo infecciones y así regular el pH de la vagina, colaborando al flujo y
lubricación vaginal.
4 Aloe vera:
esta es una de las plantas más usadas para contrarrestar la sequedad
vaginal, usándose como crema, humectando la zona y supliendo la lubricación
natural del cuerpo.
1. Dos cucharadas del cristal de aloe vera.
2. Una cuchara de leche líquida (10cc).
3. Mezcla el aloe vera con la leche y aplicándola en la zona, al menos una
vez al día.
5 Existen suplementos en hierbas que sirve para controlar la resequedad vaginal:
entre estas están el ginseng, el hinojo, los productos de soja, y las semillas de lino, por
eso trata de incluir estas semillas en tu dieta. La vitamina C, el perejil, el anís, el
extracto de lavanda podrían ayudar igualmente a aliviar las molestias.
6 Recuerda mantener una vida sexual activa y saludable, que colabore a la
estimulación vaginal, que regula y ayuda a tonificar los tejidos vaginales. Además
de lo nombrado anteriormente.
7 Es importante mantener el suelo pélvico en forma:
debes recordar que en esta cavidad se encuentra la vagina y otros órganos; cubiertos por los músculos de la
pelvis, y tú sabes que si la zona es fuerte y sana, apoya a la salud íntima. Sin
embargo, la caída de los niveles de estrógenos la debilita.
8 Hay ejercicios para fortalecer la zona pélvica:
como las bolas chinas, los ejercicios de Kegel colaboran en el fortalecimiento de la musculatura pélvica, aumentando el
flujo de sangre a las zonas vaginales, así como a la humedad y la lubricación
vaginal.
Muchas mujeres postmenopáusicas experimentan este síndrome, pero son pocas las que
hacen tratamiento, ellas se pueden sentir avergonzadas de hablar de sus síntomas con algún
médico y pueden resignarse a vivir de esta manera, por eso aquí mostramos la importancia
de los remedios naturales, algunos ejercicios y busca ayuda médica si presentas sangrado o
manchado vaginal inexplicable, secreción inusual o dolor.