El reflujos gastroesofágico es el paso de los ácidos gástricos al esófago por debilitamiento o apertura del esfínter diafragmáticos, causando una irritación en la luz del mismo sintiéndose un ardor molesto, inflamación e irritación.
Por medio de fármacos y ciertos remedios caseros se puede disminuir la excesiva producción de ácidos gástricos para evitar el reflujo, de igual forma gozar de un buen protector estomacal para hacer que las células no produzcan dichos jugos no está demás.
Beneficio de los remedios caseros
Se ha demostrado en ciertas investigaciones que los remedios caseros son una de las mejores opciones a tener para combatir el reflujo, a través de las propiedades medicinales de las plantas y algunos compuestos, es posible controlar la excesiva producción de jugos estomacales.
• Completamente naturales
La mayoría de los remedios caseros para combatir el reflujo son elaborados a base de planta medicinales, su naturalidad es del todo ventajosa pues evita los famosos efectos rebotes.
• Protección de la mucosa gástrica
La mucosa gástrica es una capa de moco que reviste la luz del estómago encargada de evitar que los jugos gástricos afectan el tejido celular, por medio de las propiedades de las plantas a mencionar más adelante, esta mucosa no solo es protegida, sino reforzada.
• Estimulador de la reparación en tejidos afectados
Se demostró con estudios científicos que algunas plantas usadas para combatir el reflujo tienen el poder de incentivar a la producción de nuevo tejido sano, algo muy ventajoso cuando son usadas para aliviar y combatir en reflujo, pues mejoran y curan el tejido que se ha visto irritado.
• Regulador del PH
Aunque no se crea, el PH juega un papel muy importante para combatir el reflujo, y es que se busca hacerlo más alcalino, siendo esto posible gracias a las mismas propiedades que ciertas plantas y compuestos orgánicos poseen.
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Principales remedios caseros para combatir el reflujo
La naturaleza por medio de las plantas y algunos compuestos orgánicos ofrece las herramientas necesarias para las afecciones orgánicas más comunes, para beneficio de quienes están siendo afectados por el reflujo, se cuentan con remedios del todo provechosos.
1. Agua de limón
Por muy contradictorio que se lea, el limón por ser ácido es usado para combatir el reflujo, su PH al ser metabolizado por el organismo se vuelve más alcalino, logrando regular la producción de jugos estomacales neutralizándolos.
Ingredientes:
• Medio limón de tamaño mediano.
• 1 vaso con agua potable.
Preparación:
La preparación es sencilla, el medio limón debe ser cortado por la mitad, el zumo de una parte debe ser agregada al vaso con agua y la otra parte introducirla en el mismo, mezclar muy bien y dejar reposar y refrigerar por un tiempo de 4 minutos, estando listo para ser consumido.
Consumo:
Se puede tomar todos los días en la mañana 30 minutos después del desayuno, esto hará que se evite la excesiva producción de jugos gástricos, mantenimiento el efecto terapéutico por el resto del día, seguir el tratamiento por una semana completa.
2. Bicarbonato de sodio
El bicarbonato de sodio es un compuesto orgánico que tiene múltiples funciones, y una de ellas es naturalizar la excesiva cantidad de jugos gástricos, su uso moderado puede ser terapéutico, evitando la irritación de la mucosa esofágica causando una excelente sensación de bienestar.
Ingredientes:
• Un vaso con agua potable.
• 1 cucharada pequeña de bicarbonato de sodio.
Preparación:
Agregar en el vaso con agua la cucharada de bicarbonato de sodio y mezclar muy bien hasta lograr que el mismo se disuelva totalmente, se deja reposar por unos 3 minutos refrigerado, pasado el tiempo está listo para ser usado.
Consumo:
Se recomienda ser consumido solo cuando se tengan la molestia y el ardor característico en la zona epigástrica, como máximo dos veces al día, no se puede abusar de este remedio casero, ya que pueden aparecer sus efectos adversos.
3. Té de manzanilla
Cuando se habla de problemas estomacales la manzanilla no puede dejar de mencionarse, posee propiedades calmantes, refrescantes y controladoras siendo muy ventajosa para combatir los reflujos dejando una excelente sensación de frescura.
Ingredientes:
• Una cucharada manzanilla.
• 100 mililitros de agua potable.
• Una cucharada pequeña de miel de abeja.
Preparación del té:
En un envase de metal colocar el agua a fuego lento y dejar que alcance el punto de burbujeo, alcanzado el mismo agregar la cucharada de manzanilla y remover muy bien hasta que se torne el típico color amarillento en el agua.
Retirar del fuego y dejar reposar hasta que pierda el calor por completo, agregarle la cucharada de miel y remover hasta que se disuelva, antes del consumo se puede refrigerar.
Consumo del té:
En vista de los segura que es la manzanilla se puede tomar todos los días 30 minutos antes del desayuno, esto evitará que el organismo produzca excesivamente jugos gástricos, refrescará el epitelio esofágico y ayudará a la digestión de los alimentos.
4. Jugo de sábila
La sábila es de las plantas que al igual que la manzanilla tiene grandes propiedades, en el caso del reflujo es usada para la protección del revestimiento gástrico y esofágico, de sabor neutro y fácil de conseguir es un remedio casero predilecto.
Ingredientes:
• Media porción de pulpa de sábila.
• 100 mililitros de agua potable.
• 1 cucharada de miel de abeja.
Preparación del jugo:
En la licuadora agregar los 100 mililitros de agua potable y la porción de la sábila, licuar muy bien hasta que quede una mezcla homogénea, si se nota muy espeso agregar unos 100 mililitros más de agua hasta ser más líquido, se le integra la miel y se sigue mezclando.
Se retira de la licuadora y se coloca a refrigerar por unos 10 minutos como máximo, estando listo el jugo para ser disfrutado y aprovechado.
Consumo:
Al ser un jugo un poco espeso y muy refrescante se recomienda ser tomado 20 minutos después del desayuno, las propiedades de la sábila se aprovecharán y el cuerpo las usará para proteger la mucosa y el tejido esofágico y gástrico, evitando la irritación por los jugos y el reflujo.
